lunes, 19 de febrero de 2018

El tiempo entre el silencio

Sinceramente, si dejé de escribir en este blog (algo que hacía de forma asidua cada semana) fue en parte por dos motivos. El primero porque me era muy difícil decir algo nuevo sobre el club. El embargo copaba toda la actualidad y la parálisis inducida que nos "regaló" el ex presidente, o ex gestor, o ex parásito, Pablo Comas (y su séquito, los Martín, no olvidemos, que olvidar lleva al desastre: José Luis Martín, ex presidente de la Federación de Peñas que "vendió" al Recreativo por un asiento lleno de suciedad y los consejeros Antonio Martín y Jesús Martín, que con su silencio y lealtad a Pablo Comas ayudaron a que la salvación del Decano fuera más díficiles, todos personas non gratas para el club) había poco de lo que hablar. Si a los pocos temas de conversación le añadías que deportivamente no estábamos lanzando un mensaje ilusionante y que adquirí un compromiso semanal en el diario Viva Huelva (los viernes podéis leerme), los argumentos para escribir en este blog se hacían cada vez más pequeños.

Hoy, por fin, el Embargo de Hacienda, la Espada de Damocles, se ha solventado. Ha sido un tiempo de nervios, conspiranoias, enfados ante la poca transparencia, diferentes vertientes de actuación entre la destrucción total o la confianza y un tiempo en el que los aficionados hemos estado juntos pero a la vez nos hemos marcado a nosotros mismos como problemas. Así de débil es nuestra mente, y puede que eso forme parte de lo humano. Se pudo llegar a este punto quizás antes, quizás mejor, quizás de forma clara... pero si algo he aprendido en la vida es que no puedes querer agradar a todos porque entonces estás perdido completamente. 

La salvación del Decano comenzó con el Recre Trust, y esto no es publicidad, esto es una realidad histórica. Desde el momento en el que muchos aficionados cedieron sus acciones a este colectivo y se tuvo una representación real en la Junta de Accionistas. Aficionados contra el mayor enemigo del Decano, contra Comas, cara a cara. Mentiras, trabas y un juego muy sucio por parte del madrileño que intentaba descapitalizar el club mientras se favorecía él mismo y a sus amigos José Luis Peña y Fernando Iturbe y engañaba a otros muchos, especialmente a Benjamín Naranjo, que fue presidente creyendo que hacía bien cuando sólo era otro juguete o la vergonzosa "venta" a Cascajo. Una guerra de difícil solución pero que fue mediática: una masiva manifestación de recreativistas y ciudadanos onubenses dejaron claro cual es la actitud de esta ciudad frente a su equipo. Me río ahora de partidos minoritarios que buscan tres pie al gato. Aquel día fue clave para saber que había que mojarse por el Recre.

El primer año en 2ªB fue una supervivencia horrible con final épico. Pasamos por José Domínguez como técnico y llegó Ceballos. Un equipo de gente de Huelva, y toda Huelva con un euro, llenó el Nuevo Colombino tras lanzarse un mensaje en redes sociales de que el club podía jugar su último partido. Nos salvamos, lo celebramos, y de pronto el Ayuntamiento sacó una bomba ese verano: expropiarían el Recreativo de las manos de Pablo Comas gracias a que el club había sido considerado BIC (Bien de Interés Cultural).

Con la experiencia adquirida una campaña antes, el Recre Trust organizó una nueva campaña de salvación que contó con el liderazgo y confianza de la expropiación del Ayuntamiento y, por fin, liberada de José Luis Martín, con el apoyo de la Federación de Peñas. Huelva realizó otra movilización, esta vez económica. Lo llamaron Líberos del Decano y no sabéis que tan acertado era el nombre. A pesar de que no llegamos al importe necesario, en una desesperada operación el 30 de Junio se consiguió poner el dinero suficiente para competir otro año.

Nos la veíamos felices, pero Pablo Comas seguía dentro mientras la burocracia cumplía su camino, y cómo no, no puso fáciles las cosas ese verano. Alejandro Ceballos, que se había marchado como un héroe, regresaba sin que nadie lo quisiera como un villano. Qué experiencias más tristes e inhumanas hemos vivido estos años... lo cierto es que el día de mi cumpleaños, 6 de Octubre, se confirmó oficialmente la expropiación. Volvimos a ponernos contentos, pero nada era lo que parecía. El tiempo, como siempre, jugaba en otra liga muy diferente a la que se juega en el césped. Otro año de salvación agónica (quizás menos agónica) pero que recuerdo con las lágrimas de Pavón y el titánico esfuerzo de una Junta Directiva que tenía mucho que perder y poco que ganar.

Y es que entre tantas letras que llevo, los empleados del club no habían cobrado ninguna nómina. Ese era el drama real, más allá del sentimental, de lo que ocurría en el Recreativo. De nuevo otro verano lento, un proceso de venta perfectamente legal que acabó con la mejor noticia por parte del Ayuntamiento: no vender a quién no es confiable. En el último minuto, de nuevo, de un día 30 de Junio, se confirma que podemos competir gracias a un préstamo y contrato firmado con una empresa que iba a gestionar el club: Eurosamop.

Al principio Eurosamop sonaba de todo menos bonito. Era ridículo pensar de forma diferente. Pero cierto es, con el tiempo, y hasta el día de hoy, que Juanma López, el ex jugador del Atlético de Madrid que encabeza el proyecto, ha respondido de la mejor forma posible. Aquí, prácticamente, comenzó mi silencio en el blog. Era más de lo mismo, estábamos embargados, no éramos felices deportivamente y todo se reducía a depender de otros. Nervios, conspiraciones, señalarnos entre nosotros sacando toda nuestra idiotez.

Pero Deus Ex Machina. Llegó tarde, porque se esperaba para Noviembre, pero llegó. El embargo se ha quitado hoy mismo, fecha tan importante como un ascenso de Primera. Ahora hay que mantenerse en la categoría: el Recre debe venderse, y cuanto antes, para que los que critican que el Ayuntamiento pague (un tema muy delicado para mí debido a la ignorancia general) mantengan el pico cerrado. Aunque, mirando atrás, esa manifestación, ese Nuevo Colombino lleno con 20.000 personas, esa campaña de Líberos... ¿qué carajo nos van a contar?

Lo mejor es que la travesía en el desierto ha terminado. Deja señales en el rostro, en el corazón y en el alma. Nos hemos conocido en las peores circunstancias y sabemos que respondemos. Quizás debemos confiar más en nosotros mismos, en la gente que sí quiere que esto salga adelante. Pero también hay que sembrar la desconfianza y queja ante lo que no conocemos, ante lo que puede poner en riesgo nuestro Decano. Y ahora, hay que mantenerse en la estabilidad: vender, luchar por los derechos adquiridos en la campaña de Líberos (le pese a quién le pese), cumplir a rajatabla el convenio con Hacienda, pagar a los acreedores y construir sobre cenizas.

Construir sobre cenizas. Sería bonito decir que el Recre es como el Ave Fénix, pero para renacer como el pajarraco de fuego hay que morir. Y no, aunque hemos sido un auténtico zombie, nos han humillado, vilipendiado y reído de nosotros... la sangre albiazul nunca dejó que el Recreativo de Huelva muriera.

Ahora seguimos el camino. Ahora hay cosas que hacer. No es tiempo de silencios. Es tiempo de aspirar a ser los mejores.

Seguimos.